Entre sus facetas de escritora, periodista, diplomática, feminista, promotora cultural, poeta y profesora, Rosario Castellanos Figueroa también se preocupó por la ayuda y servicio comunitario a la población indígena en Chiapas, por lo cual el teatro fue su herramienta y vehículo que le permitió adentrarse en esta labor.
La también embajadora de México en Israel en 1974 y una de las más grandes literatas mexicanas del siglo XX contribuyó al impulso y creación de programas sociales de prevención médica, mejoría agrícola y de previsión para evitar y superar los usos y costumbres, por ejemplo, el alcoholismo, en distintas regiones del sureste mexicano.
Éstos y otros hechos fueron dados a conocer por Edith Padilla Zimbrón, poseedora de la Cátedra Especial Rosario Castellanos y profesora en el plantel Oriente, en una charla con el estudiantado y una función de teatro guiñol.
Durante su ponencia “Al rescate del mundo. El legado teatral de Rosario Castellanos en el Instituto Nacional Indigenista”, Padilla Zimbrón habló de la trayectoria de la escritora de cuento, poesía y dramaturgia, entre ellas, las obras Balún Canán, Oficio de tinieblas, Álbum de familia o Poesía no eres.
La maestra Padilla Zimbrón destacó que la herencia de esta gran mujer abarcó un amplio recorrido por comunidades chiapanecas, acompañado de tzetzales y tzotziles, quienes crearon un teatro guiñol.
Aunado a ello, surgió la marioneta principal Petul, personaje que se desempeñó como un orientador y escucha ante los problemas familiares o comunitarios reflejados en esa sociedad.
“Petul es el protagonista de aventuras, es el prototipo del hombre avispado, abierto a las noticias que le traen sus amigos mestizos o blancos. Gracias a su intervención, el desenlace siempre es un triunfo de la inteligencia, sobre las supersticiones, del progreso, de la tradición o de la civilización, e incluso sobre la barbarie”.
En tanto, la pareja de Petul es Xun, su contraparte, un indígena muy reacio a aceptar los consejos y las indicaciones del otro; “el que se niega a asistir a la escuela, pretextando trabajos impostergables; el que desdeña las sugerencias de los técnicos agrícolas: el que en vez de consultar a un médico, llama a un brujo; el que encuentra en el alcohol el camino de la sabiduría, del olvido, del aturdimiento”.
Sin embargo, comentó que al final Xun abandona sus errores, redimido no tanto por razones ni por experiencias adversas, sino por el ejemplo optimista de Petul.
Por último, alumnas y alumnos ofrecieron un espectáculo a través del teatro guiñol con una temática vigente, como es el machismo y el alcoholismo, los cuales persisten en la sociedad mexicana.
